Después de pensar en lo adorable de un niño mofletudo sonriente he sufrido una revelación divina: No conozco a ningún mofletudo cabrón.
He repasado los grandes cabrones de mi vida i los grandes dictadores de la historia y no se me ocurre nadie! ¿Habré echo algún gran descubrimiento?
No hay comentarios:
Publicar un comentario