Leo y me gusta

Ahora leo más que no escribo, podría leer, por ejemplo, lamono, revista cultural de tendéncias que distrubuye gratuitamente en Barcelona, Madrid y Donostia.

Clowndestina se ha colgado

... y piensa que debería volver a escribir más a menudo,
que le vuelve a gustar el periodismo,
que añora el ligero exhibicionismo de contaros sus historias
y sus cavilaciones.

Las adoro

Le odio

Mundo G

Hace un par de días que veo el mundo enmarcado. Es como si de una foto se tratase pero imagínense una imagen que se sale de los bordes del marco colorado. Al acercarme el café con leche //hoy ha sido el más deseado de mí vida, llevaba ya dos días sin probar-lo// se me empaña el mundo, aunque solamente sean unos segundo, parece todo nublado y blanquecino. Me he vuelto una espectadora más preocupada por los límites de mi visión que por aquello que veo.

Hace un par de días que he pasado al otro lado: soy de las que lleva gafas. Y creo que he cruzado una línea sin retorno.

14 de noviembre del 2007

¿Estamos en el 2007?

¿Vivimos en un país democrático?

¿Puede alguien explicarme porque entonces se multa con 3.000 euros//o con ni una peseta// por caricaturizar un personaje de la vida pública, sea político, monarca o farlopero?

Día de A

A de ... aburrida, agobiada, anginas hinchadas, agarofobia, antiestamínico, apatía, Antonia Font de fondo...

así paso un día de anginas.


P.D.: Gracias por los ánimos. Se aceptan sugerencias.

La casa azul

Ajena a mi voluntad he sufrido esta tarde una experiencia estética que ha afectado gravemente mis sentidos y la percepción que tengo del mundo //hasta ahora creía que había mucho gilipollas suelto, ahora puedo confirmar que hay más borrego del que parecía en un principio//. Así que os propongo cinco razones para no ir jamás a un concierto de La Casa Azul:

1. El cantante no es capaz de recordar sus canciones, ni la letra ni la música.

2. No afina.

3. Le aplauden pese a no tener ninguna gracia ni musical, ni no musical.

4. Te encotrarás rodeado de popys totalmente a-críticos que se entregaran a semejante tortura auditiva.

5. Es de mal gusto.