viernes, 3 de agosto de 2007

Fronteras, límites, divisiones, margenes....¿?


Mientras pienso que vestidos apretujare dentro de la maleta se me ocurre pensar: ¿Para quién son las fronteras? Puedo viajar legalmente a Turquía, leer un libo japonés y comer comida tailandesa. En nombre del ocio el pequeño burgués europeo tiene prácticamente todas las fronteras abiertas, pasaporte en una mano y tarjeta de crédito en otra podrá fotografiar y coleccionar países exóticos.
Si no tienes dinero la cosa se complica y más si te juegas la vida por intentar tener un futuro mejor, eso ya no está bien visto, no forma parte del ocio viajar en patera al paraíso prometido donde encontrar un trabajo. Para que exista un paraíso son necesarios los limites, una frotara que separa quien puede y quien no formar parte de él.
Les recomiendo que visiten Fronteras, una exposición que esta ahora en el CCCB, como mínimo no les dejara indiferentes. No olviden que hasta la cultura tiene fronteras y deberán pagar su entrada. Tómenselo con calma, hay mucho que digerir.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bueno, a ver, la cultura tiene fronteras en Barcelona. Si vas, por ejemplo al Patio Herreriano en Valladolid, o al MUSAC en León, la entrada no te cuesta un duro.

Barcelona, que la tenemos repleta de ventajas...