domingo, 19 de octubre de 2008

Me permitirán que me confiese: leo, a veces, literatura basura. Si, estos libros post-modernos que han dejado de preocupar-se por la forma y únicamente vomitan un montón de ideas algo inconexas entre ella, pero muy interesantes. Todo esto viene a que he comprado “Nocilla Expeierence” de Agustín Fernández Mallo. Me parecen un estupendo complemento vitamínico para pensamientos varios y, puestos a confesar-me, me encantaría algún día poder escribir algo así.


Les copio un fragmento cualquiera…

“Por fin han encontrado las armas de destrucción masiva. Las tenía el dictador ocultas en su propio cuerpo. Y sólo era una, cuidadosamente cosida a su estómago. Una cápsula de 1 cm3 unida a un micromecanismo cuántico adjunto que podría ser activado mediante un control remoto mental. En efecto, con sólo concentrarse precisamente en ese punto del estómago, y dirigir ahí toda la fuerza de los pulmones e intestinos en virtud de una técnica adquirida por viejos métodos de respiración yoga, el citado micromecanismo se activaría soltando un veneno que haría morir al instante al dictador. La destrucción masiva vendría dada por un efecto dominó: la oleada de inmolaciones en cadena que prevé el Corán Tipo-B para estos casos, a imagen y semejanza de esa otra reacción en cadena que damos en llamar “nuclear”. Cristianismo, budismo, islamismo, y tecno-laicismo en un solo relámpago.”

1 comentario:

agosto_esquimal dijo...

En esta vida hay que leer de todo ;) Desde el curro te mando un besito, que aburrimiento de día.